El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, ha salido al paso de las declaraciones del mandatario electo de EE.UU., Donald Trump, quien afirmó que tropas chinas operan de manera ilegal en el Canal de Panamá. Mulino rechazó categóricamente estas acusaciones, subrayando que no hay presencia militar china en la vía interoceánica, y reafirmó que el canal sigue siendo un punto neurálgico de libre tránsito para el comercio internacional.
Trump, a través de su cuenta en la red Truth, insinuó que soldados chinos controlaban el canal, al mismo tiempo que anunciaba el nombramiento de Kevin Marino Cabrera como embajador de EE.UU. en Panamá. Además, el presidente electo ha lanzado amenazas sobre la posible revocación del control panameño del canal, que Panamá retomó plenamente en 1999 tras el tratado de neutralidad acordado en 1977 por el presidente Jimmy Carter.
En respuesta, Mulino hizo énfasis en que "el mundo es libre de visitar el canal", descartando rotundamente las especulaciones sobre interferencia extranjera en uno de los pasos comerciales más importantes del mundo.
Con información de HispanTV.